jueves, 7 de enero de 2010
Principios social demócratas (FUSDA)
La construcción de toda sociedad está determinada por diversas
cosmovisiones que responden a un conjunto de valores y principios que
orientan las acciones y percepciones de las personas. En este sentido, los
valores y principios, entendidos como metas ideales y modelos de
organización social, son elementos fundamentales de toda ideología y, por
ende, de todo proyecto político.
La socialdemocracia como corriente política que conjuga los mejores
elementos de las dos principales ideologías progresistas de la modernidad
–el liberalismo y el socialismo- tiene como principales valores la justicia, la
libertad y la solidaridad. Estos tres valores se condicionan, se
complementan y se limitan mutuamente; son la base de toda democracia
moderna, en la cual existen todas las condiciones para que los seres
humanos se desarrollen digna y plenamente.
A partir de estos valores se desprenden otros más como la
corresponsabilidad, la igualdad, el progresismo y la tolerancia; así como
ciertos principios que aspiran a erigir una sociedad justa y democrática,
por ejemplo, un Estado democrático y garante, una sociedad civil activa y
responsable y una economía social de mercado.
VALORES
CORRESPONSABILIDAD
La corresponsabilidad implica compartir las responsabilidades entre todos
los miembros y sectores de la sociedad. Para los gobernantes y tomadores
de decisiones significa rendir cuentas de sus actos y hacer transparentes
los procesos. Para los ciudadanos significa ejercer el rol que les
corresponde en la construcción de su propio destino. Se trata de trabajar
conjuntamente para mejorar las condiciones de vida de toda la población,
en donde debe existir un equilibrio entre derechos y responsabilidades.
EQUIDAD
La equidad implica un trato justo a todas las personas, dando a cada cual
lo que le pertenece a partir del reconocimiento de las condiciones y
características de cada persona. Implica el acceso de todas las personas a
la igualdad de oportunidades y a los beneficios del desarrollo. El valor de
la equidad significa justicia, reconocimiento de la diversidad y eliminación
de cualquier actitud o acción discriminatoria.
IGUALDAD
La igualdad implica un trato idéntico a todas las personas ante la ley y la
posibilidad de que cuenten con las mismas condiciones y oportunidades
para desarrollar sus capacidades y potencialidades plenamente. Con base
en este valor, se ha luchado por la eliminación de prácticas
discriminatorias por motivos de raza, sexo, religión, opinión, clase social y
estatus político. La igualdad de oportunidades es garantizada por un
sistema socialmente justo, en donde todas las personas tienen las mismas
posibilidades de acceder al bienestar. Esto requiere la eliminación de
barreras y prejuicios para que todas las personas puedan participar en los
procesos políticos, económicos y sociales sin discriminación alguna.
INTERNACIONALISMO
El internacionalismo expresa una vocación universalista que se traduce en
la promoción de la paz, la seguridad, el multilateralismo y la cooperación
entre todas las naciones en aras del beneficio y progreso de toda la
humanidad. Se trata de la búsqueda y la lucha constante por un orden
internacional pacífico, justo y democrático. Frente a los retos que impone
el actual proceso de globalización, se busca incorporar la dimensión social
y gobernar dicho proceso democráticamente para ponerla al servicio de
toda la comunidad internacional. Este valor promueve un entendimiento
entre las distintas culturas, la superación de la pobreza, el fortalecimiento
de los derechos humanos y una ética global.
JUSTICIA
La justicia implica dar a cada uno lo suyo, es decir, dar a cada quien lo
que le corresponde según su esfuerzo, sus necesidades y de conformidad
con lo que marca la ley. Este valor exige que todas las personas puedan
formar parte de la sociedad a la que pertenecen de manera efectiva, a
partir del acceso a las mismas oportunidades de desarrollo. También
implica que se de una distribución justa del bienestar social
independientemente del origen, el género, la edad, la condición social, la
religión, etc. de las personas.
LIBERTAD
La libertad es una capacidad y facultad de los seres humanos de decidir y
actuar como lo deseen siempre y cuando no perjudiquen a otros. Para
hacer posible una convivencia armónica entre los seres humanos se
requieren poner restricciones a esta facultad. Por lo tanto, la libertad se
concibe como un derecho acompañado de responsabilidad. La libertad
implica llevar a cabo un proyecto personal de vida, tener la posibilidad de
realizarse uno mismo y ser dueño de nuestros propios actos. Se trata de
un valor que se traduce en autonomía y autodeterminación. Para ser libre,
las personas deben tener acceso a bienes públicos que les permitan gozar
de una seguridad material suficiente para desarrollarse.
PLURALISMO
El pluralismo se refiere a la existencia de múltiples elementos en la
constitución de la sociedad y, por lo tanto, el reconocimiento y el respeto
de la diversidad. La posibilidad de promover un desarrollo humano integral
exige la manifestación libre de lo plural en todas las dimensiones sociales.
PROGRESISMO
El progresismo es una tendencia a mejorar las condiciones de vida y a
perfeccionar los mecanismos sociales para alcanzar un desarrollo y un
progreso benéficos para toda la humanidad. Dicha tendencia se
contrapone al conservadurismo que intenta mantener el statu quo y ciertos
privilegios. Es una tendencia de izquierda que tiene como prioridad la
igualdad social, que potencia los valores colectivos y que lucha por una
sociedad laica, igualitaria y solidaria. Este valor denota una actitud
optimista y la idea de la perfectibilidad del ser humano con miras a
construir un destino mejor.
SOLIDARIDAD
La solidaridad implica sumarse a la causa de otros y actuar a favor del
bienestar colectivo, reconociendo las diferencias y necesidades de todos los
grupos sociales. Significa tener la disposición de responder por otras
personas de forma activa y voluntaria. Es un valor que une a los miembros
de una sociedad a partir de una comunidad de sentimientos y actitudes
frente a situaciones de riesgo y amenaza. La solidaridad puede traducirse
en acciones a favor de aquellas personas que sufren formas de opresión,
discriminación o exclusión. Por lo tanto, implica el establecimiento de
relaciones horizontales y simétricas entre todos los miembros de la
sociedad. El valor de la solidaridad orienta las propuestas y políticas de
redistribución de la riqueza y de los beneficios sociales entre todos los
miembros de la sociedad, así como las medidas contra la desigualdad y la
exclusión sociales. La solidaridad organizada se traduce en un Estado
social.
TOLERANCIA
La tolerancia implica respetar y aceptar las ideas, opiniones, creencias y
prácticas de los demás a pesar de ser diferentes o contrarias a las propias.
Es decir, sugiere la libertad de expresar opiniones a pesar de no ser
compartidas por el resto de la sociedad. Este valor supone desarrollar
actitudes y acciones flexibles y de pleno respeto a los demás. Se trata de
promover un ámbito de convivencia, donde la tolerancia representa un
elemento básico para garantizar el orden y el entendimiento pacífico entre
las personas. Dada la pluralidad de ideas y formas de ser en toda sociedad
moderna, la tolerancia se entiende como el reconocimiento de las
diferencias y la garantía de la igualdad de derechos.
PRINCIPIOS
DEMOCRACIA SOCIAL E INTEGRAL
La democracia social es una noción integral de democracia que incluye
dimensiones formales, participativas y sociales. Respecto a la dimensión
formal, ésta se refiere al establecimiento y garantía de las reglas mínimas
de competencia y participación electoral, así como la representación de los
intereses de la sociedad mediante partidos políticos. La dimensión
participativa, por su parte, además de considerar los elementos formales
promueve la participación de los ciudadanos en el proceso de toma de
decisiones. Finalmente, la dimensión social se refiere a la traducción de
estos elementos civiles y políticos en un bienestar social real. Se trata de
una concepción más amplia que concibe a la democracia como una forma
de vida y no como un mero sistema de gobierno. La democracia social
aspira a crear las condiciones para lograr la total inclusión de los
ciudadanos a la sociedad.
DERECHOS HUMANOS
Los derechos humanos son un conjunto de prerrogativas inherentes a la
naturaleza de las personas que abarcan derechos civiles, políticos,
económicos, sociales y culturales. La realización y garantía de los derechos
humanos es indispensable para que las personas logren un desarrollo
integral.
DESARROLLO SUSTENTABLE
El desarrollo sustentable es aquel que satisface las necesidades de las
generaciones presentes sin comprometer la posibilidad de las generaciones
futuras de satisfacer sus propias necesidades. Este principio incluye la
idea de las necesidades básicas de las personas para vivir dignamente y la
idea de las limitaciones impuestas por la naturaleza y la capacidad de la
organización social para satisfacer dichas necesidades. Se trata de la
búsqueda de un equilibrio entre la explotación de los recursos y la
satisfacción de las necesidades humanas, tomando siempre en cuenta a
las generaciones venideras. Económicamente, implica el reparto y la
distribución equitativa tanto de los costos como de la riqueza generada en
la sociedad.
ECONOMÍA SOCIAL DE MERCADO
Una economía social de mercado se basa en el sistema de libre mercado –
concebido como una forma de organización y producción eficiente para
crear riqueza y bienestar social- pero con la intervención del Estado para
enmendar los desequilibrios económicos y las desigualdades sociales. Así
como se promueven acciones de competencia e innovación, también se
fomentan prácticas tendientes a crear una distribución justa de la riqueza.
En este sentido, se impulsa al establecimiento de un Estado social previsor
que intervenga en los procesos económicos. La aceptación de la economía
de mercado no debe confundirse con una sociedad de mercado, donde se
sacralice a éste. Se trata más bien de un sistema en el que el Estado actúa
socialmente con eficiencia dentro de la economía de mercado.
EQUIDAD DE GÉNERO
La equidad de género se refiere a la igualdad de oportunidades entre
hombres y mujeres en el proceso se desarrollo, a partir del reconocimiento
de las diferencias y las necesidades propias de ambos sexos. Se trata de
un principio democrático que intenta eliminar todo acto de discriminación
con base en el género, el cual conduce a la inclusión de todas las
personas, tanto hombres como mujeres, en la sociedad. Este principio
aboga por la plena participación de las mujeres en los asuntos públicos, ya
que hasta el momento muchos de sus intereses y necesidades han sido
subordinados respecto al de los hombres.
ESTADO DEMOCRÁTICO Y GARANTE
Un Estado democrático y garante es aquel que se organiza a partir de
reglas y normas aceptadas por la mayoría y que garantiza los derechos
fundamentales de todos los miembros de la sociedad. Al velar por el interés
general y al proteger a los miembros más vulnerables, el Estado
democrático y garante promueve la solidaridad y la convivencia armónica
entre todas las personas. En aras de garantizar la equidad social y
asegurar que los beneficios sean producidos y distribuidos de manera
justa entre toda la sociedad, este tipo de Estado interviene en los procesos
económicos, corrigiendo las fallas del mercado y evitando las
desigualdades sociales. Se trata de un Estado comprometido con los
derechos sociales, el cual garantiza los mínimos de bienestar social a
través de la universalización y exigibilidad de los derechos fundamentales
de los ciudadanos.
ESTADO DE DERECHO
El Estado de Derecho es aquel Estado que se rige por el principio de la
legalidad, es decir, por el respeto y apego a las leyes y las instituciones que
organizan a la sociedad. Se trata de un Estado que protege y garantiza los
derechos y las libertades fundamentales de todas las personas. Asimismo,
implica la separación e independencia de los diferentes poderes –Ejecutivo,
Legislativo y Judicial. Sugiere que las instituciones actúen de manera
imparcial al momento de aplicar reglas y normas, eliminando toda
posibilidad de actos arbitrarios. Al privilegiar el imperio de la ley, se
establecen límites al abuso del poder, se garantiza certidumbre e
imparcialidad entre la sociedad y se reivindican los derechos y las
libertades fundamentales.
ESTADO LAICO
El Estado laico significa en términos generales la separación entre el poder
político y las doctrinas religiosas. Es decir, se impide que el poder político
se sustente en un credo determinado, a partir del cual se intente imponer
una cosmovisión particular. En este sentido, un Estado laico asegura que
todos los miembros de la sociedad tengan el derecho de vivir según sus
propias creencias: el derecho a la libertad de culto. Asegurar que las
instituciones se rijan fuera de toda legitimidad religiosa, implica el
reconocimiento de la soberanía popular como única autoridad legítima.
GOBERNABILIDAD
La gobernabilidad sugiere que el poder de gobernar sea ejecutado para el
bien común de toda la sociedad a través de instituciones y prácticas
democráticas. Implica dar respuesta eficaz y legítimamente a las
demandas sociales a través de un Estado de Derecho sólido que mantenga
un sano equilibrio de poderes y un gobierno capaz de administrar los
recursos públicos de manera eficiente. El principio de la gobernabilidad
hace referencia a la estabilidad de las instituciones políticas, a la
capacidad de articular los intereses de todos los actores sociales y a la
posibilidad de regular y resolver los conflictos de manera pacífica y
civilizada. En este sentido, a través de la gobernabilidad se busca una
estabilidad política y un ambiente social armónico, donde no haya
violencia de ningún tipo. Se trata del desarrollo de un buen gobierno: a
mayor y mejor gobernabilidad, mayor y mejor desarrollo económico y
social.
INCLUSIÓN SOCIAL
La inclusión social es un proceso que busca ofrecer a todas las personas
las oportunidades y los recursos necesarios para poder desarrollarse y
participar plenamente en todos los ámbitos de la vida. Este principio se
contrapone a las situaciones de exclusión social que en la mayoría de los
casos es sufrida por los grupos sociales vulnerables como los pobres, los
menores de edad, los ancianos, los discapacitados, los enfermos, las
mujeres, los indígenas y los jóvenes.
PARTICIPACIÓN CIUDADANA
La participación ciudadana supone que los ciudadanos sean capaces y
tengan la posibilidad de influir en el quehacer político, en el proceso de
toma de decisiones, en el diseño de proyectos y programas y en la gestión
de los recursos. Es una manera de fortalecer la democracia vía el
empoderamiento e involucramiento de los ciudadanos en los asuntos de
interés público. Este principio se traduce en mecanismos normativos como
el plebiscito, el referéndum, la iniciativa popular y la convocatoria a
funcionarios públicos a rendir cuentas.
SOCIEDAD CIVIL ACTIVA Y RESPONSABLE
Una sociedad civil activa y participativa es aquella que se encuentra
comprometida con la construcción de su propio destino, tanto individual
como colectivo. Se trata de la construcción de una ciudadanía libre y
responsable que erige a los ciudadanos como verdaderos interlocutores en
los procesos políticos y sociales. Al participar en los quehaceres públicos
de manera responsable, la sociedad civil crea vínculos solidarios, fomenta
acciones de cooperación y reconocimiento mutuo, y promueve actitudes de
reciprocidad. Este principio es fundamental para limitar el poder de los
mercados y el gobierno y para civilizar los espacios públicos. Cabe
destacar que una sociedad activa y responsable requiere de información
veraz para poder participar con coherencia.
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